Ya estoy en capilla, despues de hacer una preparación algo
diferente a la de un maratón normal, pues, si no me lesiono no quiero parar
después de la prueba reina, el domingo es el día D, el día de la Maratón de Sevilla, en la
que estaran en línea de salida 7150 corredores dispuestos a vencer la distancia
de Filípides, en lo que será la reedición de mi debut como maratoniano, aquí en
la ciudad andaluza y mi séptimo maraton.
Ha sido una preparación con altibajos, en la que he
disfrutado de estados de forma fenomenales y también estados de forma
deprimentes, ha habido semanas de cerca
de 100kms y semanas de menos de 70kms, con muchos problemas musculares, no se
si por el frío, pues yo no he tenido tantas veces estos problemas.
También ha sido una preparación con mas series de las que
suelo hacer para preparar el maratón, pues también quiero tener algo de chispa
de velocidad para el campeonato de Europa de Veteranos en pista cubierta, que
se celebrará en San Sebastián un mes mas tarde.
En fin, una preparación diferente, en la que solamente el
resultado final, dirimirá si ha sido buena, regular o equivocada.
En un principio, mi objetivo no será otro que volver a bajar
de las 3 horas, además en esta ocasión, creo, que el globo o la liebre de las
tres horas será nada más y nada menos que el campeón del mundo de maratón
Martín Fiz, por lo que será una pasada correr junto a él un maratón, y si al
final me encuentro con fuerzas, que lo dudo, intentaré bajar algo más de las 3
horas en este recorrido que dicen que a pesar de estar cambiado algo, sigue
siendo de los mas llanos de Europa.
Por lo que el sabado parto para la capital hispalense
acompañado de Ángela y Jorge, esperando que la climatología sea favorable y en
el viaje no suceda nada imprevisto, por lo que ya os contaré el resultado.
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