lunes, 11 de mayo de 2020

VOLVEMOS A CALZARNOS LAS ZAPATILLAS Y DAR ZANCADAS CON “MEDIANA LIBERTAD”.

Poco a poco volvemos a dar zancadas, volvemos a lo que nos gustaría fuese la antigua normalidad, y empezamos a calzarnos las zapatillas y a poder recorrer kilómetros y kilómetros por caminos, asfalto o zonas habituales donde corríamos antes, sin poder salirnos de nuestro municipio, y en algunos casos fuera de los parques públicos, con una franja horaria impuesta, que puede gustar más o menos, pero creo que es la adecuada, aunque personalmente me venga fatal en algunas ocasiones.

Esa libertad total de movimiento, horarios y compañía no la tenemos aún, por lo que ahora cobra más fuerza el CORREDOR DE FONDO y su soledad,  y se echa de menos lo que no se tiene, aunque en realidad la mayoría de las veces somos lobos solitarios y hacemos nuestras salidas en soledad.

Seguro, y eso espero, pronto volvamos a poder correr en grupo, disfrutar de conversaciones y hacerse la salida más pasajera, y después nos podremos echar alguna cervecilla juntos, comentando pormenores del entreno y de la vida misma, también estoy seguro que pronto podremos fijar en mente un objetivo, una carrera, aunque para eso quede mucho más, PONERSE UN DORSAL  pero anhelo a esos compañeros del circuito, verlos y tambien   conversar con ellos.

Ahora toca ir poco a poco, como si saliendo de alguna lesión se tratase, acostumbrando de nuevo las piernas al impacto, sintiendo el aire en la cara, también el polen que tanto me afecta, en términos musicales iremos “in crescendo”, rodando cada vez más kilómetros a mayor ritmo, aunque la falta de motivación también sea un hándicap, pero el gusto de dar zancadas no nos la quitaran tan fácilmente, esperando no se vuelva para atrás y suframos un receso en los contagios, que vayamos sumando días y que cada vez, aunque con las precauciones pertinentes, esto vaya pasando y con el tiempo los libros de historia cuenten que esta fue una pandemia a la que vencimos, gracias a que los humanos fuimos cívicos y respetamos las normas...

Os animo desde estas líneas a seguir luchando respetando las normas  para que con el paso del tiempo no entremos en relajación, y cuanto mejor lo hagamos, antes terminará este mal sueño. FUERZA Y SALUD…, Y KILÓMETROS PRUDENTEMENTE.