A veces es inevitable e incluso viene bien, echar la vista atrás, y recordar los kilómetros recorridos, y el domingo pasado fue un día de esos, vamos cumpliendo años y parece que todo debe de seguir igual, pero no es así, aunque insistamos, todo cambia, cambian las caras, cambian nuestros cuerpos, cambia la forma de pensar, cambian muchas cosas…, pero ahí seguimos insistiendo y persistiendo, disfrutando de lo que nos gusta, en cada momento, aunque se alargue en el tiempo y la vida siga dando vueltas.
Pues eso, con el cambio de planificación de entrenamientos, y aunque estamos muy verdes, la media maratón de Valdepeñas era un test perfecto para ver el inicio del nuevo camino, del nuevo cambio, y aunque no llegamos del todo satisfechos, si podemos decir que estamos en el camino correcto, pero hasta que no lleguemos a destino no podemos hacer un balance definitivo.
Llegábamos con ganas de hacerlo bien, y con esa premisa hicimos el calentamiento habitual, como siempre buscando sensaciones, y junto con Santos, un verdadero veterano en estas lides, desde la salida, nos propusimos correr por sensaciones, pero en torno a nuestro umbral, y así fue prácticamente durante toda la carrera, a un ritmo muy lineal, si bien los últimos kilómetros nos costaron más, perdiendo esas buenas sensaciones que tuvimos desde el principio.
Al final 1h26’42”, a ritmo 4’05”, lejos de tiempos de antaño, satisfecho, es lo que tenemos y con lo que disfrutamos, la vida pasa y nosotros también. SALUD Y KMS
