No voy hacer crónica de lo sucedido el domingo, en esta entrada solo quiero expresar las sensaciones que se vuelven a sentir al poner de nuevo un dorsal tras tanto tiempo, lo que se vive los días previos a la competición, las horas anteriores y posteriores a cruzar la línea de meta, y aunque las circunstancias organizativas y algunas normas son muy diferentes a las de hace un año, volver a competir no ha cambiado.
He vuelto a sentir esos nervios previos días antes de la competición, cuidando los entrenos y las comidas, incluso incidiendo en los descansos, cuidando detalles y olvidados, he vuelto a dormir poco la noche previa, madrugar y levantarme con nervios pre competición, desayunar y viajar dirección al circuito, ir acompañado de mis compañeros, charlando de la que nos espera, llegar y recoger el dorsal, saludar a cuantos amigos hacía tiempo no veía, y empaparse del ambiente competitivo, disfrutar del momento, ese momento que tanto echaba de menos.
Colocarse en la salida, junto a rivales, amigos y compañeros, con nervios de un novato, y tras el pistoletazo de salida darlo todo, aunque no sea mi prueba favorita, ni la modalidad deseada, pero es llevar un dorsal, plasmar los entrenamientos, comprobar el estado de forma y como responde mi regenerada rodilla, llevar el corazón a tope y conseguir llegar a meta una vez más, la primera tras un largo periodo, sufrimiento y satisfacción a la par, aunque más de lo segundo, sin duda sensaciones muy esperadas y reconfortantes.
Cambiarse y volver a charlar con los compañeros, tomarse unas cervezas, celebrar la vuelta y volver a casa con una cara que hace tiempo no recordaba, cansado pero contento, hemos vuelto, y volveremos más veces, cuanto echaba de menos estas sensaciones, nos hemos perdido un año de todo este mundillo, pero la alegría de volver y esperar que esto vaya a mejor cura en parte esta circunstancia, esperar volver a más amigos corredores, en las distintas pruebas que se vayan celebrando invitan a seguir disfrutando de este deporte que me tiene enganchado, sin duda el domingo fue un día GRANDE.