Vida Atleta: "Correr no son sólo números"

Muchos atletas viven atados a sus cronometros y obsesionados con bajar sus marcas. Ellos, olvidan que esa no el base fundamental del running y se olvidan de los primordial: disfrutar. Mirá esta nueva reflexión de Santiago Cisneros, en esta nota.

Correr es un placer que nos da la vida, así como tantos otros placeres, pero pongamos un ejemplo: Imaginen que delante de ustedes está su plato de comida favorito, ese que realmente los causa muchísimo placer y los hace feliz, todos tenemos uno.Ahora bien, imaginen que cuando están por comenzar a comerlo viene alguien y les dice: tenés 3 minutos 40 segundos para comerlo. Seguramente ese gran placer no se daría tal cual es ¿verdad?. Imaginen a ustedes mismos proponiéndose un tiempo para comerlo lo mas rápido posible y te presionás para que cada vez más para podes comerlo más rapido. Te aseguro que no tendrían tiempo ni siquiera para saborearlo y pasaría de ser un placer a algo desagradable. Ésto también sucede permanentemente en el running para realizar determinados tiempos y cierta cantidad de kilómetros ya sea entrenando o en carreras. Pero ¿es realmente indispensable ponerse metas en tiempo cuando uno es un corredor principiante?

Progresión y orden en la búsqueda de objetivos:

Si bien el cronometro es una herramienta esencial en los entrenamientos, hay otras cosas que un corredor principiante debería tener en cuenta. Una persona persona que recién empieza a correr debe pasar por ciertas etapas de aprendizaje y acondicionamiento físico. Sin embargo, he observado que en muchos casos el atleta no realiza esta progresión y termina cometiendo muchos errores que terminan en lesiónes, demotivación y presión psicológica.

La etapas del corredor:

·         El trotador: es aquel que recién comienza y trota muy despacio. Intercala corridas con caminatas.

·         El corredor: el atleta ya tiene un poco más de experiencia, corre de forma más continua y veloz. Aumenta el volumen del kilometraje.

·         El competidor: aquella persona que no solo corre fuerte sino que también ahora intenta ganarle a los demás y bajar sus marcas.

·         El atleta: yo lo definiría como la fase final. No le interesa sólo competir, toda su vida observa un régimen de vida en particular, una filosofía de vida y pensamiento basado en la salud y el deporte.

Sea cual fuere la etapa en la que uno se encuentra no debería faltar algo muy importante que muchas veces lo olvidamos. Simplemente disfrutar de correr. Estamos tan inmersos en correr carreras, bajar las marcas, ganarle a los demás, demostrar a nuestros compañeros y darle el gusto a nuestros entrenadores que los números se nos meten en la cabeza y nos olvidamos de saborear nuestro "plato favorito".

Correr no son sólo números:

Como entrenador y atleta reconozco lo importante que es plantearse objetivos. Se que para entrenar y conseguir las metas deseadas hay que tener en cuenta métodos de entrenamientos que apuntan a calcular metros, kilómetros, segundos, minutos y horas. Pero antes y durante todo ese entrenamiento no debés olvidar que correr no son sólo numeros. Podés progresar, evolucionar y crecer sin mirar ni una vez el cronometro.

·         Mi consejo es que salgas a correr y mires hacia adentro para conocer tu propio “yo” corredor y crezcas como atleta.

·         Crecés cuando aprendés a cuidar tu salud.

·         Cuando te fortalecés mentalmente y podés correr 20 kilometros en una pista de 400 mts.

·         Cuando lográs tener una constancia de acero en los entrenamientos.

·         Cuando cambiás grasa por músculo gracias a una buena dieta.

·         Cuando te das cuanta que se puede disfrutar de correr sin presiones psicológicas por buscar un marca.

El atleta crece de arriba hacia abajo, primero la mente y luego las piernas. De adentro hacia fuera, primero desarrolla un buen corazón y no hablo del que bombea sangre hablo del que mueve a la personas por las razones correctas. El corredor crece cuando corre sin presiones y realmente puede decir que aprendió a disfrutar cuando corre sin mirar el reloj. Porque cuando uno no mira el reloj no existe el tiempo no hay que correr ni lento, ni  rápido. Puede durar un instante o una eternidad y ser igual de hermoso. Hay mucho para aprender y disfrutar antes de correr mirando el cronometro. Una vez descubierta esta gran verdad los resultados esperados en números serán mas fáciles de alcanzar y mas gratificante conseguirlos.