“Ser prudentes, regular, ir con ilusión y nunca con temor ni miedo... el
maratón es un sentimiento que con palabras se puede adornar pero no se puede
explicar hasta que no lo vives en tus piernas…”
Bueno, ya está, prueba
conseguida, objetivo cumplido, meta lograda…
El domingo tras a eso de
las 5 de la mañana nos poníamos en camino Jorge, Ángela y yo junto con 30
compañeros del club, rumbo a Madrid, unos disputarían los 10K, otros la Media Maratón,
unos cuantos el Maratón y otros cuantos más que allí nos esperaban.
La mañana se presentaba fría,
incluso al paso del autobús por Madridejos, vimos caer la nieve con fuerza pero
conforme nos acercamos a Madrid esta desapareció, y lo que no desapareció fue
el viento y el frio que hacia pues mientras nos reuníamos todos en la puerta
del Ayuntamiento para repartir dorsales y cambiarnos de ropa, el frio y aire
era evidente, sobre 3ºC y una sensación térmica de 0ºC.
Bueno dispuestos en la
salida tras unos problemillas con el ropero de parte de algunos compañeros, guardaríamos
un minuto de silencio con el gesto con la mano de la “b” de Bostón y la
alcaldesa de Madrid, daría la salida a las 9 en punto.
Multitudinaria la salida
conseguí salir en posiciones delanteras, pero no por eso marcaría un ritmo
demasiado fuerte pues el primer kilómetro fue a 4’17”, ya en el segundo se juntó conmigo el
debutante Joaquín Efraín Perona, que fue mi compañero durante casi toda la
maratón.
Las sensaciones no eran
como en otras ocasiones, pues el frío y el aire no dejaban trabajar a los músculos
en la temperatura ideal, pero el ritmo
era el marcado, pues no quería perder las opciones de bajar de las tres horas,
a pesar de ir un poco más delante del globo, pues no lo vi en toda la carrera,
la prudencia me hacia ir reservando fuerzas para el final de este duro maratón.
Ya en el 10, el ritmo era
demasiado alto 41’30”, pero lo favorable de la primera parte del recorrido me decía
que había que llevar algo de colchón, Efraín seguía conmigo, siguiendo el ritmo
que yo marcaba. El paso por Sol y calles adyacentes hizo que la adrenalina se
disparase máxime cuando estaban por allí Jorge y Ángela y de nuevo hubo que
retenerse y seguir reservando fuerzas.
La media maratón en 1h 27’
47”, por lo que llevaba casi un minuto de antelación a mi ritmo previsto, pero íbamos
cómodos en todo momento, en el km 23 tuve que parar para hacer aguas menores,
pues creo que iba hidratado de más, ahí perdí unos valiosos 30 segundos que
tuve que recuperar con un esfuerzo extra para alcanzar de nuevo a Efraín.
El paso por la casa de
campo, fue bastante triste, aparte de que hay ya el aire empezaba a soplar con
fuerza y empecé a no encontrarme tan cómodo, por lo que reduje un poco el ritmo
y deje pasar los kilómetros.
En el km 34, Efraín
aumentó el ritmo y le dije que no se preocupara de mí y que si estaba bien que
tirara por lo que hay me descolgué de él, pero mi ritmo era el mismo, por lo
que en el km 36 y cuesta arriba daría de nuevo alcance a Efraín y un grupo que
iba a ritmo, por lo que aguanté ahí hasta que en plena cuesta de atocha, (km
39), el grupo se dispersó e Efraín me dijo que tirara que él iba a regular para
llegar, dudé en qué hacer si esperarlo o continuar, pero al ver el bajo ritmo de este decidí
seguir para delante para asegurarme conseguir bajar de las 3 horas que era nuestro
objetivo.
Los últimos kilómetros
eran duros, con constante subida, pero ya estaba cerca y antes de entrar al
Retiro mi hermana estaba esperándome, animándome y corriendo para inmortalizar
el momento fotográficamente, una vez dentro del parque del Retiro, ya solo quedaban
unos 600 metros, mi alegría al ver a Pepe, Manoli, Angela y como no Jorge que
estaba deseando entrar en meta conmigo, por lo que decidí darle la mano e ir
juntos a meta, sintiéndome feliz al ver a mi hijo a mi lado en una carrera como
esta, por lo que disfrutamos los dos de lo lindo en estos últimos metros. Al
cruzar la meta esperé a Efraín, pues llegó apenas 30’ detrás de mí, lo felicité
por su gran maratón, pues un debut en Madrid así, es algo al alcance de muy
pocos.
Al final mi tiempo real fue
de 2 horas 58 minutos y 20 segundos, por lo que el objetivo se cumplió con
creces y no llegué a sufrir prácticamente en ningún momento, por lo que parece
ser que el cuerpo se va acostumbrando a que le dé caña, ahora a descansar y si
la recuperación es buena….. …. Seguiremos.
Por cierto, mis
felicitaciones a todos los miembros del club que corrieron alguna carrera, y
mis agradecimientos a todos los que me siguen y apoyan pues sin ellos esto
seguro sería diferente.
Eres un máquina Joaquín ;)
ResponderEliminarby: laura