MEDIA MARATÓN DE VALDEPEÑAS. (MI CRÓNICA PERSONAL)

El domingo pasado, como he relatado en la crónica anterior, se celebró la primera prueba del circuito de carreras populares de Ciudad Real, concretamente la XIX edición de la Muy Heroica Media Maratón de Valdepeñas, y allí estuve, poniendo a prueba mi preparación para el maratón de Roma.

A las 8:30 de la mañana los atletas populares de Membrilla nos reunimos en el punto de encuentro habitual, donde partimos hacia la ciudad del vino, con tiempo más que suficiente como la organización había recomendado.

La mañana pintaba bien, pues aunque algo fresca, apenas soplaba el aire, eso sí, el poco que soplaba era del norte y frío, pero con los guantes y los manguitos y algo de crema calentadora mitigué.

Tras recoger los cuatro dorsales para todas las carreras del circuito, esta incluida, la bolsa del corredor  y conversar con algunos amigos de otras localidades, me dispuse hacer el calentamiento, un calentamiento de unos cuatro kilómetros por los alrededores, donde me acompañaron el atleta del Moral de Calatrava, que este año defiende los colores de su localidad, Joaquín Tercero y mi primo Pepe, a los que se sumaron algo más tarde,Manoli Morales y Mª José Jimenez.

Como el coche estaba aparcado cerca, me cambié de ropa y me puse la citada crema calentadora, manguitos y guantes y para la línea de salida, donde me situé en cuarta fila con algunos compañeros y amigos del circuito.

La salida la hice controlada a ritmo de 3’50” que era el que en un principio me había fijado, a espera de obtener las primeras sensaciones, sensaciones que no fueron buenas durante todo el recorrido.

Ya en el kilómetro 3 daría alcance a mi primo Pepe, que había salido más fuerte que yo, pero que se mantenía en el grupo de la primera fémina, Gemma Arenas, y en el cual viajamos a ritmo de 3’50” hasta el kilómetro 11 aproximadamente donde este grupo numeroso había aminorado y fue entonces cuando decidí irme para delante con algunos otros runners del grupo, a pesar de que las sensaciones seguían sin ser  buenas.

El ritmo se mantenía entre 3’50” y 3’55”, pues algunos repechos hacían que el ritmo bajase por momentos, los 4 atletas que me precedían pusieron pies el polvorosa, mientras yo no pude seguir ese ritmo que debería haber seguido sin problemas, pero que esta vez las sensaciones de cansancio muscular no me lo permitieron, eso sí, también iba dando alcance a algunos atletas que iban algo peor que yo.

Ya en el kilómetro 18, y tras la ingesta de medio gel que tomé en el 16 me vino un pequeño subidón lo que me permitió terminar la prueba bastante bien y acelerando al final.

Aunque el ritmo y el tiempo final no está nada mal 1h21’24” a 3’52”, las sensaciones no fueron buenas en ningún momento, no sé si por la carga de kilómetros, o por no estar totalmente recuperado de la gastroenteritis de la semana anterior, o porque motivo, pero lo cierto y verdad que no estuve como quería estar y haber bajado un minutillo más esa marca, pues creo que estaba en condiciones para hacerlo.

Bueno ahora a seguir entrenando, pues faltan cinco semanas para Roma, y aunque el objetivo no es batir mi marca, si quiero llegar lo más en forma posible para disfrutar de la maratón y poder ir oteando los monumentos de la ciudad eterna.