Hoy toca hacer resumen de este último mes, bueno mejor
dicho, desde que finalicé el maratón de Madrid el 24 de abril, un periodo más
largo de lo habitual haciendo mi resumen, pero es que esta vez hay poco que
contar.
Ya a mediados de enero sufría un dolor en el isquio pero era
un dolor soportable, una molestia que me hizo dudar pues con ella corrí la
media maratón de Santa Pola, y aunque paré una semana, posteriormente seguí
entrenando, eso sí, reduciendo el kilometraje, para finalizar el maratón de
Sevilla como así hice, de nuevo unos 15 días de parón me vinieron bien para
recuperarme muscularmente, pero esa dolencia seguía igual, por lo que deduje
que quizás ese dolor no se producía corriendo, así pues, me embarque en el cto.
de España de veteranos y después el maratón de Madrid, con dicha molestia que
aunque no era impedimento para correr, si había algo que no estaba bien en mi
isquio derecho.
Tras ese 24 de abril cruzando la línea de meta en el parque
del Retiro, lo tenía claro, había que parar y recuperarse, descansar e intentar
eliminar esa pesada molestia, así pues y tras visita al médico rehabilitador
este me puso un tratamiento de 10 sesiones de corrientes y ultrasonidos,
también un antinflamatorio, pero esto no surgió efecto y tras esas 10 sesiones
y 15 días sin dar una zancada el dolor era prácticamente idéntico al mes de
enero.
Como estaba decidido a eliminar esa dolencia, empecé con
sesiones de fisioterapia particulares y seguía sin correr, aunque tenía en
mente, como no, la carrera de mi pueblo que se celebraba el día 22 de mayo, una
carrera solidaria de 10 kms que había que correr sí o sí, así pues con dos días
de rodaje me puse en la línea de salida y complete la prueba en algo menos de
41’, a un ritmo cómodo, pero el dolor persiste.
Ahora sigo en el dique seco, esperando la recuperación
total, con sesiones de fisioterapia, y a expensas de otras pruebas (resonancia mágnetica)
que determinen el origen de este dolor, que aunque no me impide correr, si es
molesto para la vida diaria, y no quiero agrandar, puesto que ahora está en pleno apogeo otro de
mis enemigos, (la alergia al polen), añadido a que no tengo ningún objetivo a
corto plazo en mente, el parón está plenamente justificado, aunque me cueste un
montón no salir a disfrutar de dar zancadas, y quizás algún día, aunque sea por
poco tiempo, y a ritmo muy tranquilo, salga para quitarme “el mono”, pues no me
lo han prohibido expresamente, ni mi físio, ni el médico especialista.
Así pues, ahora toca esta fase de descanso y recuperación,
que espero no se alargue, para ya a finales de verano y primeros de otoño estar
dispuesto a preparar nuevos objetivos.
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